La jornada ha empezado todavía de noche, a las 6 de la mañana cuando he tomado un escueto desayuno a base de cereales. Me esperaba un duro día por delante y sabía que iba a pasar rápido. Al llegar al coche, aparcado en la calle Pirineus, me ambiento con la canción "Masaje" de Astrud, que por cierto, volverán a salir más tarde en este mismo texto. La letra dice tal que así: "acaba de una vez, acaba de una vez conmigo...". El paralelismo es evidente. Repito un par de veces "Caridad" y "CD", dos de mis favoritas, y cuando estoy a punto de llegar al instituto, escucho a Pablo Motos en M80. Me niego a volver a escuchar "Masaje".
Una vez en La Mercè, me cruzo en los buzones con la Princesa Leia y pienso que soy un afortunado por poder empezar la semana con una persona así a mi lado. ¡Qué mujer! Ya en la 404, ofrece un momento de sonrisas al probar el juguete fantástico de un alumno... ¡fantástica! Resulta fácil llevarse bien con ella...
Paso las dos horas corrigiendo los trabajos prácticos de radio, y pienso que realmente han mejorado algo. Las prácticas de mesas tampoco estan nada mal... si comprobamos el nivel con el de principios de curso, por fin veo que nuestro esfuerzo con ellos ha servido para algo.
En la biblioteca me preguntas por ella. Yo no he querido sacar el tema, pero accedo sin resistirme. Entre potenciómetros y faders, me recomiendas que no la fuerce, que no haga comentario, que deje fluir... y te lo agradezco. Lo tengo en cuenta.
Te vas y acabo los exámenes de C10 Tarde. Herzio arriba, herzio abajo. Como con Z y de paso me quedo dos de sus monederos. Para C y M, pienso. Detallazo. Z es grande.
Continúa la maratón. Hablando con Z se me hace tarde y salgo pitando hacia Via Laietana donde he quedado con Iggy a las 15h. Lo primero que hago es felicitarlo por el gran paso, aunque sea con un año de retraso. Está hambriento y cansado y nos dirigimos a Sants.
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